Objetivos: Las malformaciones vasculares raquimedulares son entidades relativamente infrecuentes con una incidencia del 4% de todas las masas primarias intrarraquídeas. La fístula arteriovenosa dural espinal (FAVDE) constituye el grupo más frecuente. Ésta suele cursar con signos de mielopatía progresiva que supone un reto diagnóstico para el neurocirujano.

Métodos: A propósito de dos casos clínicos se procede a revisión literaria exhaustiva a través de la plataforma online My Athens permitiendo el acceso a Pubmed-NCBI, OvidSP, Dynamed Plus, Clinical key y Proquest. Se discute, basado en la evidencia, las principales cuestiones relativas a la epidemiología, clínica, diagnóstico y tratamiento como método de actualización para la práctica clínica diaria.

Resultados: Las FAVDEs presentan una prevalencia del 70% y una incidencia anual de 5-10 casos/millón de habitantes. Suelen afectar a la sexta/séptima década de la vida con una preponderancia masculina. Se trata de una conexión directa arteria-vena en la parte proximal del nervio radicular adyacente al saco dural. El resultado clínico es un déficit neurológico progresivo motor y/o sensitivo limitado a extremidades inferiores. La arteriografía selectiva es el método diagnóstico de elección. El tratamiento quirúrgico es efectivo a largo plazo en el 98% de los casos con una morbilidad < 2%. Sin embargo, el tratamiento endovascular presenta una tasa de éxito inferior con mayor tasa de recurrencia.

Conclusiones: La fístula arteriovenosa dural espinal forma parte del amplio diagnóstico diferencial en un paciente que se presenta con mielopatía progresiva. Revisar conceptos epidemiológicos, clínicos, diagnósticos y terapéuticos favorecerá la resolución de casos clínicos similares que se presenten en un futuro.